ASOCIACIÓN AMIGOS DE CUDILLERO: ENTREGA DE LOS PREMIOS ConCienciA 2022

El Auditorio del Occidente de Oriente de Asturias, en Luarca, el pasado viernes 24 de marzo, fue el escenario de la entrega de los primeros premios “ConCiencia” otorgados por el centro de divulgación científica “Parque de la Vida” liderado por Luis Laria, entusiasta de la ciencia en general y su divulgación, que fue el encargado de abrir el acto.

Comenzó éste con el concierto didáctico “El Orden del Tiempo”, interpretado al violín por Tobías Fernández acompañado a la guitarra por su padre Telmo, en el que se realizó una proyección de imágenes del universo que fueron comentados por el propio Telmo Fernández.
A continuación se pasó a la entrega de los premios correspondientes a la primera edición siendo D. José Manuel González Estévez, ex responsable de calidad de Airbus Space el primero en recibirlo. Mostró su agradecimiento por el mismo manifestando su respeto por el Parque de la Vida signo a su entender de respeto, educación, inquietud y enriquecimiento personal que aporta a quien lo visita motivación por el aprendizaje y respeto a la naturaleza generando una gran voluntad por aprender y sensibilizando para proteger lo que tenemos, fomentando el amor a la tierra y su cuidado. Trajo consigo dos sorpresas que acabaría entregando a Luis Laria para dicho centro: una antena que debería haber estado en Marte, aunque finalmente no fue enviada al planeta, y una maqueta del SeoSat, satélite español que se desvió por error y hubo de ser destruido en pleno vuelo.

D. Ángel Guerra Sierra, investigador del Instituto de Investigaciones Marinas de Vigo, considerado uno de lo mayores expertos en cafalópodos y calamares gigantes recibió asimismo el premio agradeciéndoselo a Luarca y a todos los que han colaborado en que el Parque de la Vida sea una realidad y por la inestimable labor que viene realizando a lo largo del tiempo.

D. Telmo Fernández, Director del Planetario de Madrid y profesor de Astrofísica, fue el siguiente en recibir su galardón animando a los presentes a utilizar bien el tiempo. A disfrutarlo. A hacer todas aquellas cosas que nos produzcan satisfacción y a divertirse con lo que uno hace, entusiasmándose con las cosas tomando como referencia el Parque de la Vida, lugar ejemplar de estímulo a la curiosidad.

El premio asturiano fue para D. Juan Luís Álvarez del Busto, tanto a nivel individual como por su labor al frente de Amigos de Cudillero de quien transcribimos toda su intervencion:

Dignísimas autoridades, compañeros galardonados (doctores Ángel Guerra, Telmo Fernández y José Manuel González Estévez), querido y admirado Luis Laria, señoras y señores, amigos todos.

En nombre de la Asociación “Amigos de Cudillero”, que me honro en presidir, y en el mío propio, muchísimas gracias por este nuevo reconocimiento que, por cierto, lleva un nombre encantador y sugerente, ConCienciA, porque en él convergen dos palabras cual más preciadas. Conciencia y ciencia, que, modestamente, nos vienen como anillo al dedo al colectivo cultural cudillerense, ya que, por una parte, tenemos la conciencia muy tranquila por la labor socio-cultural que estamos llevando a cabo desde hace más de treinta años, trabajando con honradez y con pasión, tratando, sencillamente, de promocionar Cudillero, Asturias, en cualquier acto que celebremos o allá donde vayamos.

Cudillero es un hijo que llevo en la sangre, herencia genética que recibí, fundamentalmente, de una persona que pasó por el mundo con humildad y sencillez, sin pedir nada a cambio por su extraordinaria labor cultural a favor de su Cudillero mágico. Me refiero a mi abuela Elvira Bravo. Y a ella le dedico este premio, algo que estoy seguro mis compañeros de directiva comparten, porque si no fuese por ella, la Asociación que presidido no existiría, ni en el fondo ni en la forma..

La otra palabra vinculada con el galardón, Ciencia, qué mejores referencias que las de Ángel Guerra, Telmo y Estévez. En este caso, he de confesar mi admiración por sus respectivas labores; y no puedo dejar a citar a mi bisabuelo Agustín Bravo, “Roque”, farmacéutico, teósofo, escritor en prosa y en verso y científico, autor entre otras obras del libro Materia y fuerza, que se ocupa de la teoría de la relatividad, de la desintegración del átomo y de otras cuestiones tan de moda en aquella época, a principios del siglo veinte. Por cierto: sus padres, que eran vaqueiros, poseían y regentaban el hotel “Embajadores”, en la Carrera de San Jerónimo, número 4, de Madrid, donde, desde uno de sus balcones, Isaac Peral recibió hace 133 años el homenaje de los madrileños con motivo de haber inventado el submarino torpedero. Y allí conoció mi bisabuelo, entre otras personalidades, a José Zorrilla y a Núñez de Arce, con los que mantuvo una gran amistad. Pero esta es otra historia.

Lo cierto es que ciencia también lo constituye el hecho de crear y mantener viva y vibrante más allá incluso de España la labor de un colectivo cultural nacido en un pequeño concejo de Asturias que, entre sus actividades destacan la Fiesta Literaria de la Mar -con sus prestigiosos Cuadernos Literarios y el Concurso Literario “Cudillero, el pescador y la mar”-, la “Amuravela de Oro”, preciado galardón de ámbito internacional y, por supuesto, la revista-anuario “El Baluarte”, nuestro cuaderno de bitácora, sin olvidarnos de las iniciativas –ya realidad- para la recuperación y restauración del patrimonio histórico-cultural del concejo.

Antes de terminar, quiero y debo tener un emotivo recuerdo para Juan Antonio Martínez Losada, “Estremera”, fallecido en enero pasado y que desde 2004 desempeñaba el cargo de Cronista Oficial de Valdés con sabiduría y eficacia. Un abrazo, querido amigo, allá donde estés